El proximo domingo 26 de julio, se celebra el día de Santa Ana. Quizas para muchos sea un día o un santo más, pero para los podólogos es una fecha importante o por lo menos debiera serlo ya que se celebra el "Día del Podólogo". Tradición que se remonta a la monarquica Francia del siglo XVIII, donde el hambre, la miseria el pillaje y la mendicidad, consumía al pueblo galo. En ese ambiente una pequeña de 14 años de nombre Clotilde Heristal, huyendo de estos flajelos busca refugio en un convento Católico, incorporándose a la orden de Santa Ana, congregación que mantenían como lema "Practicar el Bienestar del Silencio", el régimen de Pan negro y hacer la pedicuria a los pobres y enfermos.
Al morir Clotilde dejo como legado uno de los primeros escritos básicos de pedicuria. Estos relatos motivó la propuesta en Francia de nombrar a SANTA ANA, patrona de la Pedicuria, desde donde se propagó al resto del orbe.
En Chile el primero en realizarlo, fue el podólogo Alejandro Iribarren y para ello escogío la ciudad de Concepción. Desde ese 26 de julio del 2003, lo ha seguido realizando donde quiera que se encuentre, invitando a autoridades tanto nacionales, regionales y comunales, con el sólo afan de crear conciencia en las autoridades de salud de la importancia y el rol del podólogo dentro de la sociedad chilena.
Espero poder asistir es 26 de julio a la iglesia Santa Ana, ubicada en la estacíon de metro del mismo nombre y poder recordar a aquellos colegas que han luchado por la profesión, por los que lo hacen y por aquellos que ya no estan con nosotros...
Desde esta humilde tribuna los invito a refleccionar un minuto, por nuestra profesión, nuestro futuro y el de nuestra familia.
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